jueves, 17 de octubre de 2019

¿En qué piensas cuando escuchas una afirmación como "los monstruos si existen"? ¿Quizá pensaras que habrá mitología bajo esta frase o habrá una narración ficticia? Pues bien, alguna vez en mi vida escuché esta frase, con que estos "seres" vivían debajo de nuestra cama desde que nosotros estamos chicos o algunos se refugiaban en nuestro armario por años para acusarnos de cosas que no habíamos hecho o para asustarnos durante toda la niñez. Pues hoy por hoy creo que esos monstruos si existieron y algunos aun nos acompañan en la adultez, pero no están ni estuvieron refugiados en nuestra habitación, más bien permanecen de residentes en nuestras cabezas y nos atormentan a algunos, de manera más fuerte, no todos tenemos a los mismos monstruos dentro de nosotros, ellos tienen infinidad de personalidades y características propias de ellos, no tienen aspectos tangibles, más bien lucen como nosotros los adaptemos a situaciones, son llamados: orgullo, ansiedad, odio, ira, envidia, apego, egoísmo, celos, miedo, tristeza, soberbia, culpa, resentimiento, arrogancia y muchísimos más que impiden que disfrutemos de los innumerables milagros que ocurren todos los días; como poder emprender un día distinto cada día, mejorar la vida de alguien, sonreír y esparcir esa energía por todos los rincones, dar las gracias, servir, saludar y un sin fin de detalles maravillosos dentro de esa rutina que llevamos día a día pero que no solemos identificar y nos obligamos a ver una zona de confort aburrida y frustrada, no quiero decir que está bien permanecer siempre en nuestra zona de confort más bien extenderla y ampliar nuestros conocimientos dejando de lado tantos monstruos que no nos permiten ver lo esencial de las personas y la cosas es lo quiero trasmitir.
técnicas saludables desde lo personal, es hacer una reunión y por muy descabellado que suene, sentarnos a hablar con todos ellos y preguntarles de donde provienen, que quieren, que ganan con ello y a quien afectan con permanecer siempre allí, en otras palabras, "introspección" conoce por qué haces lo que haces, evalúa todos los parámetros y permítete tomarte un descanso de estos imaginarios "seres" que no te dejan conseguir la plenitud, haz las paces con ellos y minimiza la presencia de estos dentro de ti, hasta que puedas decirles que deben irse y desistir de apropiarse de tus ideas, ellos quizás no entiendan con la primer comunicación establecida, haz las cantidades de reuniones que creas necesarias, se le llama constancia al acto de cambiar algo después de acciones seguidas y repetitivas, impleméntalo, y veras que ellos se esfumaran, si quizás, estos están en tu cabeza como patología busca ayuda, si necesitas que en la mesa no solo estén tú y ellos sino más bien alguien más que pueda brindarte apoyo, amplia tu sala de auto aprendizaje y permítete vivir y compartir con las personas que realmente te aportan y si conoces a alguien que tenga muchos de ellos en su cabeza comunícate y hazle saber que no es necesario vivir tan rodeado de aspectos negativos y que la vida tiene un sin fin de cosas por la cuales ponernos felices a cada minuto.
Lamentablemente cuando conocemos y vivimos en carne propia el miedo, la pérdida y el sufrimiento constante, aprendemos en valor real de las cosas. Entender que la tranquilidad no tiene ningún precio y que un despertar es una nueva oportunidad de ser mejores es el camino hacia la plenitud.

¿En qué piensas cuando escuchas una afirmación como "los monstruos si existen"? ¿Quizá pensaras que habrá mitología bajo esta fra...